Los planes de pensiones pueden invertir el dinero de los ahorradores en varios tipos de activos: acciones, renta fija, divisas, y otros. INVERCO, la patronal de las gestoras de Planes de Pensión, creó una clasificación en la que podemos distinguir seis grandes categorías de planes de pensiones en función de cómo está invertida su cartera:
1). Renta Fija a Corto Plazo: Los planes que se incluyen dentro de esta categoría solo incluyen activos de renta fija en su cartera de contado, y la duración media de la cartera será igual o inferior a dos años.
2). Renta Fija a Largo Plazo: En esta categoría incluiremos aquellos planes de pensiones que no incluyan activos de renta variable en su cartera de contado, ni derivados cuyo subyacente no sea de renta fija. La duración media de la cartera será superior a dos años.
3). Renta Fija Mixta: Los planes de pensiones incluídos en esta categoría invertirán menos del 30% de su cartera en activos de renta variable
4). Renta Variable Mixta: En esta categoría estarán adscritos aquellos planes que inviertan entre un 30 y un 75% de su cartera en activos de renta variable.
5). Renta Variable: Los planes adscritos a esta categoría tienen al menos un 75% de su cartera invertido en activos de renta variable.
6) Garantizados: Son aquellos planes de pensiones para los que exista una garantía externa de un determinado rendimiento otorgada por un tercero.
