¿Mejorará la rentabilidad de las Cuentas Remuneradas?

Hubo un tiempo, no tan lejano, donde las cuentas remuneradas peleaban entre sí con rendimientos que superaban de lejos el 3% y donde los ganchos habituales nos ofrecían rentabilidades entre el 4% y el 5% durante el primer año. Sí, ese tiempo existió pero, ¿volverá?

Estamos asistiendo en los últimos dos años a un fenómeno que todavía no se le está concediendo tal vez la importancia que tiene, es una caída en picado de la rentabilidad del dos de los instrumentos de ahorro más extendidos en el uso; las cuentas remuneradas y los depósitos.

beneficios perdidas

 

Cuando hablamos de caída en picado nos referimos a descensos del 100% en la rentabilidad en períodos inferiores a un año en algunas ofertas, llegando a mínimos verdaderamente históricos en las remuneraciones en ambos productos, aunque es cierto que en general los depósitos parecen más afectados en principio, y decimos en principio porque a pesar de todo esto sigue creciendo la captación de patrimonio en depósitos, ¿inexplicable? a medias.

Aferrados al producto

Lo cierto es que el usuario medio no encuentra alternativas. Se sigue percibiendo (en buena medida con razón) los depósitos y las cuentas remuneradas como productos seguros, protegidos hasta el límite de los €100,000 y con mayor nivel de garantía que otro tipo de apuestas para el dinero propio.

Por tanto seguimos percibiendo estos instrumentos de ahorro cómo los más seguros y, teniendo en cuenta que todavía a fecha de oro y seguimos en buena medida con el miedo en el cuerpo resulta comprensible nuestra posición.

Por otro lado debemos tener en cuenta que el proceso de desinflación ha permitido que estas bajas remuneraciones no resulten tan dolorosas al menos de momento; otra cosa será si la inflación recupera su curso habitual y estos productos mantienen su rentabilidad actual, el resultado será que no lograrán batir de lejos la inflación, lo cual, se mire como se mire, perderemos dinero.

Cuentas remuneradas

¿Tienen pinta de mejorar?

Nos gustaría incluso decir que tienen pinta de no empeorar, pero tampoco nos atrevemos. La salida del verano va a ser determinante con respecto a los últimos meses del año en la posición de las entidades en relación a las retribuciones de los productos de ahorro.

De momento los tres meses anteriores al inicio del verano han sido de recortes casi constantes, en el caso de los depósitos prácticamente todas las entidades han tocado a la baja su remuneraciones, y en el caso de las cuentas remuneradas, con menos movimiento es cierto, los pocos reajustes que se han dado han sido también a la baja.

Con los tipos de interés donde están, con la política de recomendación de limitaciones a las remuneraciones todavía vigente, y en general con un ambiente muy poco propicio para la recuperación de la rentabilidad, lo cierto es que no se puede ser optimista en exceso.

Eso no significa que no encontremos algunas opciones más interesantes que otras, y que no siga siendo un producto que resulta importante el de las carteras de productos financieros personales. Es cuestión como siempre de realizar una buena elección en relación a la falta de mercado.

imagenes Geralt pixabay.com

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